La accidentada saga de la familia Noland, creada por Franz y Pecqueur, conforma uno de los grandes tesoros del cómic de los años ochenta, una obra de un humor y un dramatismo arrolladores con un argumento muy original que combina varias historias paralelas y con los dibujos de un Franz en la plenitud de su arte.
Desde la Guerra de Vietnam hasta el Salvaje Oeste, desde la fiebre del oro hasta la gran época del jazz en Chicago, el relato de la vida de Thomas Noland, sus compañeros de aventuras y sus antepasados rebosa imaginación, talento y sensibilidad. Emoción y diversión en un cómic de factura impecable que recorre cien años de fracasos y glorias.